La sociedad es demasiado bipolar. Te pide que sonrías cuando te está dando palos a cada milésima de segundo. Promete todo y no da nada. Te da la mano y te corta los dedos para que no puedas sostenerte. Te saluda cada día y cuando te giras ya te está criticando. Cambias de estilo y ya dice que quieres llamar la atención de los demás. Te tapas y ya vas de recatada, te quitas algo de ropa y ya dice que pareces una puta. ¿Algún día podremos hacer lo que realmente queramos? En definitiva, la sociedad da asco.
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