Querido Idiota, hacía días que ya no te escribía... Supongo que hoy es un día especial para ti, es tu cumpleaños... Cómo han cambiado las cosas, parece imposible que ya no estemos bien, bueno, ni bien ni mal, porque ya no mantenemos ni el más mínimo contacto. A ti te da igual no obtener una felicitación por mi parte, pero a mí me rompe no atreverme a decirte nada. Porque si te escribiese iría en contra de la razón, y de mi orgullo. Incluso podría decir de mi dignidad... Porque he acabado dando tanto por ti...
Ojalá pudiese recibir una mísera sonrisa tuya, de esas que atrapas y no dejas ir. Una mirada especial para olvidar todo lo ocurrido. Un gesto que me pida perdón. Pero no es así, ni lo será. Dos completos desconocidos no se regalan sonrisas ni su tiempo, porque es absurdo hacerlo. El problema es que me es imposible verte como una persona más de este mundo, porque eres el más complicado e impredecible, características que te hace sobresalir por encima de los demás.
Ojalá pudiese dar más de lo que he dado, pero no me queda nada más que ofrecerte. Fuimos un error que ninguno se atrevió a cometer. Espero que hoy pidas un deseo que te haga feliz...
Felicidades, incomprendido.
Hay veces que suceden cosas que no tienen explicación, parece que acabar esta relación es una de ellas.
ResponderEliminarYo también me he quedado con las ganas de felicitar a alguien que es importante el día de su cumpleaños.
Seguro que aparecerá alguien que sepa valorar lo que has, ya verás Leo, un besito!
"Fuimos un error que ninguno se atrevió a cometer".
ResponderEliminarCada día me identifico más con lo que escribes. En serio, es como si esto mismo lo pudiese aplicar a mi historia (por llamarlo de alguna manera).
Es triste que alguien que lo fue todo ahora ni se acuerde de que existimos. Ni sonrisas, ni palabras, ni nada de nada. Supongo que con el tiempo su recuerdo se irá distorsionando, hasta que el día de su cumpleaños sea un día más, y no otro día de nostalgia y melancolía.
*abrazos, muchos*
¡Hola, Leo! ^^
ResponderEliminarEs una pena que los días sean tan supersónicos y que el tiempo vuele tan deprisa, porque la verdad es que desde que descubrí este blog me di cuenta de que es genial y me encantaría poder pasar más a menudo. Pero, por mucho que luche contra el tiempo, muchas veces me acaba ganando jaja. Bueno, lo que importa es que por fin he podido pasarme. Y tengo que decirte que me alegro mucho, porque esta entrada es muy buena y me siento bastante identificada.
A mí también me ha ocurrido algo parecido, y es muy chungo ese sentimiento. Querer felicitar a alguien aunque sepas que te responderá con una mirada vacía, acordarte de ese día aunque él ni siquiera se acuerde de nosotras, querer volver atrás para poder perdernos de nuevo en sus sonrisas... Lo has descrito todo super bien, me ha llegado a la fibra sensible (tengo que confesarlo, jeje). Pues eso, que me alegro de dejarme caer por aquí después de tanto tiempo.
Besos,
Windflower.